miércoles, 3 de abril de 2013

La burocracia decide que lo que ayer era malo para la salud no lo sea hoy

Hasta ahora, consumir yogures superada la fecha de caducidad suponía un riesgo para la salud, porque así estaba establecido por ley, la misma que a partir de ahora determina que no lo es y sólo figurará en los envases el tope para su consumo preferente, con lo cual se alarga la posibilidad de ingerir el producto sin riesgo. Que la nueva medida sea la más lógica no quiere decir que la determinación del Gobierno no huela un poco a tomadura de pelo, porque lo que era malo ayer debería serlo hoy si en medio no hay más intervención que la burocrática. Y ello quiere decir que la caducidad no estaba determinada para prevenir que enfermásemos sino con el fin de blindar los beneficios de los fabricantes.
Otro tanto, ocurre, por ejemplo con la mayoría de los productos farmacéuticos, cuya caducidad está más pensada en salvaguardar intereses comerciales de los laboratorios que en evitar intoxicaciones.
La derogación de la fecha de caducidad del yogur es la primera medida del Gobierno enmarcada en la iniciativa española "Más alimento, menos desperdicio" con la que se quiere evitar que 8 millones de toneladas de comida acaben en los vertederos cada año. 
El reto es reducir a la mitad en 2025 el desperdicio de alimentos respecto a los niveles actuales gracias a esta estrategia, según marca la UE. El ministro de Agricultura ha defendido la eficiencia en el consumo alimentario por motivos económicos, sociales y ambientales y como una manera de responder al aumento de la "vulnerabilidad" de la población y a sus necesidades de nutrición en un momento de crisis económica.
 
 

1 comentario:

  1. Lo que ayer era malo, hoy no lo es tanto.... "parece frase de Rubalcaba".
    elperroverde.

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