Bocanada de esperanza

CUANDO acudimos a la consulta médica, en la mayoría de las veces es más eficaz para la cura de nuestros males lo que doctor nos diga, con palabras tranquilizadoras y de ánimo, que la propia medicina que nos prescriba. Otro tanto puede decirse de lo expresado por el ministro de Fomento al comprometer la vía férrea doble para que Lugo tenga AVE de primera. Puede que lo veamos o que nunca llegue, pero al menos es una bocanada de esperanza, que otros (u otras) nos negaron con la más arrogante displicencia. Dice José Blanco, y no podría decir otra cosa, que la reforma respecto al trazado original no se lleva a cabo por ser él de Lugo, pero que sea un lucense quien decida, porque conoce la situación y lo que nos condujo hasta agravios comparativos incalificables, es muy importante. A ver si un ministro lucense hace, por fin, algo más de lo que no hicieron otros, que lo fueron, en sus respectivas etapas. Ojalá no dé motivo para echarle en cara promesas incumplidas. De momento, cumple.

(El Progreso, 28/5/09)