¿Vale la pena fusionar municipios para cuadriplicar los salarios de los alcaldes?

Si la solución es esa, dejemos las cosas como están. Quietos parados. La pretendida fusión de los ayuntamientos tiene (debiera) como principal objetivo mermar gastos, pero si la mixtura toma el rumbo de los únicos hermanados Oza dos Ríos/Cesuras, en A Coruña, el corolario será el opuesto. La cuestionada subida del sueldo de su alcalde en un 257 por ciento (de 1.100 euros a 4.000) no deja lugar a dudas. Lo justifica el beneficiado, Pablo González Cacheiro, argumentando que también se multiplicó su tarea; lo que antes eran dos concellos, ahora es uno mucho más grande y "600 euros pueden ser muy caros y 3.000 muy baratos, depende del trabajo que se realice". Ya, pero no. Si la tendencia es, que no lo parece, reducir retribuciones a los cargos, no es soportable que se aumente y menos en esa escandalosa proporción. No sé qué pensará mi amigo José Ramón Peón, que fue alcalde de Oza durante muchos años. Me consta de su dedicación y entrega, y estoy seguro que jamás fantaseó con cifras tan desorbitadas como las que pasa a percibir su ahora sucesor.