LA MAYORÍA siente interés o curiosidad por las predicciones meteorológicas, queremos saber no sólo que tiempo hará mañana sino también dentro de quince días, y si alguien nos lo ofrece, aun sabiendo que a tan largo plazo no es fiable el pronóstico, lo damos por bueno. De eso se queja precisamente el presidente de la asociación de turismo rural de A Mariña lucense, quien arremete contra los servicios de meteorología por arruinar sus negocios con vaticinios de mal tiempo a largo plazo, pues muchas veces ni se cumplen; como es de suponer influye para que muchas personas cambien sus planes, y en vez de dirigirse a la costa lucense decidan hacerlo a lugares donde se anuncian (o no se anuncian) climatologías más propicias. Tiene razón, porque siendo importante saber si lloverá mañana, pasado o dentro de tres o cuatro días, es una temeridad profetizar otros augurios. Ya se sabe que la meteorología no es ciencia exacta, pero es mucho peor si se convierte en oficio de charlatanes.
Hace 1 hora
1 comentario:
Tengo un amigo en Vigo, director de un establecimiento hotelero, que se queja del mismo mal; con demasiada frecuencia los meteorólogos hablan en términos generales de un mal tiempo que luego no se hace realidad en su zona. No es una ciencia exacta, pero las inexactitudes le causan un perjuicio evidente a quienes dependen del turismo.
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