Sabido es que el Constitucional está para corregir presuntos desarreglos anticonstitucionales de otros tribunales. O debiera, porque lo que más percibe el ciudadano es otra cosa más parecida al chalaneo que a su función de interpretar la Carta Magna. Su decisión sobre Bildu ya se presumía por el número de progresistas y conservadores que integran tan alta magistratura. Con independencia de que sea bueno o malo que los abertzales concurran a las elecciones, es muy desagradable ver cómo se resuelve la situación por interés político y no en base a criterios jurídicos. ¿Están todos equivocados, desde el Supremo a cuántos emitieron informes que implican una relación entre las listas y Eta? Es además escandalosa la nula sintonía que existe entre el TC y el TS, siendo esta la cuarta vez que el primero corrige la decisión del segundo sobre listas abertzales. Y muy de lamentar es también el cinismo del Gobierno al disfrazar su necesidad de satisfacer al PNV con el pretexto de que las había impugnado. ¡Qué país!
Hace 52 minutos
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1 comentario:
Me figuro la cara de tontos que se les habrá quedado a la policía y guardia civil que son los que se juegan el pellejo. Es que estos no espabilan. Ya lo dijo otro: No hay cosa más peligrosa que un tonto que quiere pasar a la historia.¡Joder que tropa!
Saludos
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