Como todo lo que se mueve, depende, claro, de la óptica con que se mire. La
elección de una clínica privada por el Rey (es su derecho) para operarse
siempre tendrá doble lectura. ¿Qué no es la mejor forma de prestigiar la
sanidad pública? Opiniones, pero yendo a una particular, como fue, la factura
la asume el presupuesto de la Casa Real, con lo cual es dinero que nos
ahorramos. Sería, sin duda, el argumento a emplear por los que ahora lo
critican si hubiese utilizado esta opción. El cinismo partidista nunca carece
de argumentos, sea lo que sea, y lo que cabe resaltar es precisamente que
quienes con mayor ímpetu defienden lo publico suelen ser los primeros, llegado
el momento, en hacer uso de lo privado, como ocurre, por ejemplo, con la educación.
Quienes se vacían, por oportunismo, criticando la enseñanza privada y
ensalzando la pública, matriculan a sus hijos en colegios exclusivos. Y con la
sanidad, algo parecido; también prescinden de los hospitales púbicos. A eso se
llama pisotear la coherencia, pero como la tienen, ni se nota…
Hace 4 horas
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