Un placer, amigos

Es un honor para mi el que visites mi página y espero que descubras algo que pueda interesarte. Además de reproducir los breves artículos de opinión que en días alternos publico en el diario El Progreso de Lugo, sobre variados temas del día a día, también procuro insertar pinceladas de actualidad, de contenido histórico (no al uso) o costumbrista para hacer más amenos los textos, viajes..., aparte de incluir algunos enlaces que pueden ser útiles en determinados momentos. También os invito a seguirme. Un saludo cordial desde la romana y amurallada ciudad de Lugo, la Lucus Augusti, en España.

jueves, 10 de febrero de 2011

Ley antitabaco: los infractores no son en ningún caso víctimas

Como es evidente, la ley antitabaco tiene defensores y detractores, como no podía ser de otra manera. Incluso hay no fumadores que la critican y fumadores que la defienden, pero en líneas generales cada cual habla del asunto según más le conviene. Hasta aquí todo parece normal, porque entra en el debate democrático, en que todo el mundo tiene derecho a opinar. Otra cosa es que algunos se enrocan en no cumplir la ley, en desafiar lo acordado por el Parlamento, como ocurre con el propietario del establecimiento marbellí que amenazó con no pagar la multa que le fue impuesta por reiterados incumplimientos de la norma, con su actitud chulesca de no aceptar ninguna prohibición, y además advirtiendo que no va a satisfacer la multa. Creo que esta tarde le cerraron o iban a cerrar el establecimiento, lo que parece lógico, porque la ley está para que se cumpla. Es gual que un amante de la velocidad se resista a que le sancionen porque le gusta correr a doscientos cuando está establecido a ciento veinte. Y lo que tampoco es admisible que traten de vender el incumplimiento como si fuesen víctimas. No lo son, sino simplemente infractores y a las consecuencias han de atenerse.

1 comentario:

Felipe Tajafuerte dijo...

Si los no fumadores hubiésemos hecho el boicot a los establecimientos que permitían fumar tal cual hicieron los fumadores con los que no lo permitía, la situación seguramente sería muy distinta. Lo que pasa que los intransigentes no fumadores hemos transigido con todo.
Un saludo

Blogs que sigo

Buscar este blog