Debate nuclear: Sobran alarmismos y falta serenidad

El agrio debate sobre la energía nuclear amenaza con repercusiones imprevisibles a raíz de la catástrofe de Japón, que aprovechan sobre todo los que están en contra de las centrales para avivar y encender su oposición, convencidos de que el momento es oportuno para hacer valer sus tesis. Respetando todas las opiniones, como no podía ser de otra manera en un foro democrático, se observa sin embargo un alarmismo que sólo contribuye a crear confusión y enfrentamientos no deseados. Y falta serenidad. Por ejemplo, no acabo de entender el pánico que transmite el comisario de energía de la Unión Europea hablando de apocalipsis y cataclismos, que aun si fuesen verdad, una autoridad debe manejar esos términos con mucho tiento y moderación, porque no resuelve nada con infundir miedo a la población. En esos los propios japoneses con mucho más serenos, quizá por razones de carácter y también de responsabilidad.
Es verdad que existen energías alternativas, pero la nuclear se hace hoy por hoy necesaria aunque sólo sea pensando en controlar y mantener los costes de un consumo de primera necesidad. De no ser así, pagarla no estaría al alcance de muchas personas. Otra cosa es que se exijan todos las garantías de seguridad habidas y por haber, pero también hay que pensar que seguro, lo que se dice seguro no hay nada. ¿O no puede reventar una presa y arrasar varios pueblos, como ya tiene ocurrido? ¿No contaminan también las centrales térmicas? Alguien dirá que no es lo mismo, pero en buena parte todo dependen del control estricto que se ejerza.
¿Qué pasa con las centrales españolas? ¿Podría España sufrir un accidente similar al de Japón? Les dejo con un reportaje que publica al respecto Eroski Consumer, firmado por Alex Fernández Muerza. Pincha en en este enlace